Con el objetivo de conocer lugares que me habían quedado pendientes en viajes anteriores, como la Cuesta de Lipán, el circuito de Los Colorados y las Serranías del Hornocal, me propuse esta nueva aventura por la Quebrada de Humahuaca (declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO en el año 2003) y así poder recorrer sitios no muy distantes pero difíciles de concretar por la geografía del lugar, el clima y las alturas de más de 4000 msnm que dificultan el andar sobre dos ruedas.
Tuve el buen criterio de elegir esta época del año en la que todavía no llegaron las grandes lluvias ni los sofocantes días de calor, lo que me permitió ver la quebrada en todo su esplendor, disfrutar ese contraste del verde de los sauces y álamos con los colores de los cerros que dibujan paisajes de ensueño.
Apenas desembarcado en el aeropuerto de Jujuy, se inició el “trabajito” lógico de armar la bicicleta y empezara a pedalear por la Ruta 66 rumbo a la ciudad de Perico para visitar algunos amigos de mi viaje anterior (este recorrido ya lo había hecho en 2013 en una travesía que abarcó Salta y Jujuy hasta Iruya).
Una vez sorteada la ciudad de San Salvador de Jujuy, empecé a transitar una impecable Ruta 9 que cruza la quebrada en su totalidad y así llegué a mi primer destino, Purmamarca y sus cerros de 7 colores.
En ese punto nace la Ruta 52, corredor bioceánico hacia el paso de Jama, en Chile. El serpenteante camino se eleva hasta los 4170 msnm, ofreciendo fascinantes vistas hacia todos los puntos cardinales.
Mi meta terminaría en Humahuaca tratando de llegar a las serranías del Hornocal, otro difícil trayecto de ripio que asciende a los 4350 msnm.
Allí puse punto final a esta travesía de no más de 300 km, sin exigencias y sin apuros. El objetivo fue pedalear 60 ó 70 km diarios para disfrutar la intensidad del paisaje que ofrece la provincia de Jujuy.
Jorge Meji
INFOCAÑUELAS
Escrito por: Redacción InfoCañuelas
Jorge Meji y su travesía por la Quebrada de Humahuaca
El aventurero cañuelense relata su recorrido de 300 kilómetros hasta las serranías del Hornocal. Gal