El 7 de noviembre la comunidad de Uribelarrea se vio conmocionada por un hecho de violencia ocurrido en el horario de ingreso a la Escuela Nro. 4: una mujer -madre un alumno del establecimiento- se bajó de su camioneta y le aplicó un cachetazo a la maestra Claudia Scrochi, frente a otros padres y chicos.
De acuerdo a los datos que pudo reconstruir a InfoCañuelas, antes de abofetearla, la mujer le recriminó algo que supuestamente le dijo a su hijo. “Por qué le dijiste ´Miércoles de comesaña?´” habrían sido sus palabras. Hasta ahora nadie logró dilucidar qué es “comesaña” ni si esa frase realmente fue dicha en esos términos o quién la dijo, porque la docente aludida no estuvo en el establecimiento en los días previos al incidente.
Lo cierto es que lo ocurrido generó un amplio repudio de la comunidad, por dos razones: jamás había sucedido un episodio de esas características en la escuela de Uribe y la docente agredida es una persona muy apreciada por todos.
Ese mismo día el esposo de la agresora se presentó en la Escuela para ofrecer disculpas en tanto que Scrochi, asesorada por la Jefatura Distrital de Inspección, concurrió al Destacamento policial donde radicó una denuncia. La causa -caratulada “Lesiones Leves”- recayó en la UFI 2 de Cañuelas a cargo de Norma Pippo.
En los días posteriores la policía identificó a la agresora como Liliana Fratini y la notificó de la apertura de una causa penal en su contra.
Ante una consulta de InfoCañuelas, fuentes judiciales informaron que el caso es difícil de encuadrar, ya que no hubo amenazas ni tampoco se verificó un daño físico. Para la Ley, la lesión se configura cuando se produce “un daño en el cuerpo o en la salud”.
“Para que una Lesión leve sea considerada como tal en una causa penal, tiene que haber un precario médico en el que quede asentado, como mínimo, que la víctima tiene alguna zona enrojecida como consecuencia de un golpe o cachetazo. Incluso un zamarreo puede configurar una lesión leve si, por ejemplo, el médico acredita la presencia de marcas de dedos en determinada zona del cuerpo. En síntesis, tiene que haber una lesión que pueda ser comprobada por el médico” explicó a InfoCañuelas la abogada penalista Mariela Aristegui.
¿Y qué sucede si como resultado del cachetazo hay una afectación psíquica? Bueno, en ese caso los juristas afirman que no hay mucho para hacer desde el punto de vista penal, pero que el damnificado sí puede accionar civilmente contra el responsable y contra la institución (en este caso la Dirección General de Escuelas) como obligado solidario.
Ante esta situación, una de las posibilidades es que la causa termine en una mediación.
Entre tanto la docente -próxima a jubilarse- permanece de licencia, muy afectada desde el punto de vista anímico.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas