El viernes a las 0 hs. se puso en marcha el aislamiento social obligatorio dispuesto por un decreto de la Presidencia hasta el 31 de marzo. En Cañuelas la adhesión fue irregular: si bien el centro comercial estuvo despejado durante la tarde, en los barrios y localidades se vio mucho movimiento de vecinos, casi como un día normal.
“Esperamos que haya más adhesión durante el fin de semana largo. Por nuestra parte vamos a reforzar los controles con personal de Tránsito y Comercio, pero Le pedimos a la gente que colabore. Hoy a la mañana, por ejemplo, en la plaza Belgrano había madres con niños”, dijo a InfoCañuelas la secretaria de Gobierno, Valeria Ríos.
Sobre la situación del comercio dijo que no hubo clausuras ni multas pero sí llamados de atención, especialmente en supermercados que no hicieron cumplir la distancia interpersonal de dos metros en las filas o que no limitaron el ingreso de público a las sucursales. “Por suerte los comerciantes reciben bien las indicaciones” agregó Ríos.
Ríos también indicó que se están haciendo controles en las entradas a la ciudad, pero aseguró que el Gobierno local no está pensando en cerrar los accesos, como hicieron Monte y Lobos, donde algunas entradas secundarias fueron bloqueadas con montículos de tierra.
Durante el día circularon patrulleros y vehículos particulares contratados por el municipio provistos con altoparlantes que recordaban la obligación de permanecer aislado.
“Hasta el 31 de marzo se prohíbe la libre circulación y todas las personas deberán permanecer en sus casas. Sólo se permiten movimientos mínimos e indispensables para alimentación, salud y primeras necesidades” fue la frase martillada en distintos puntos del distrito. Sin embargo, en algunas localidades el acatamiento fue escaso.
“Soy de Máximo Paz. En el día de hoy tuve que llevar a mi hijo al pediatra del pueblo. No les puedo explicar el temor con el que salí. Una vez en el pueblo me di cuenta de que no se respeta la cuarentena, familias enteras con sus bebés, haciendo compras como si nada. O familias paseando. ¡Una vergüenza! ¡Y de la policía nada! Me gustaría que esto llegue a la Municipalidad así toma cartas en el asunto y nos cuidamos entre todos” contó Fernanda a InfoCañuelas.
En Los Pozos, en tanto, se multiplicaron las denuncias contra una comerciante que hace pocos días regresó de Brasil con la obligación de permanecer en cuarentena hasta el 4 de abril. Sin embargo, comenzó a atender al público sin cumplir el aislamiento. En la puerta pegó un certificado médico expedido por el traumatólogo Luis Bueno Guzmán el 16 de marzo, en el que se afirma que la paciente no tiene fiebre. “Certificado de la Mimi para tranquilidad del barrio”, agregó debajo. Tras la viralización de su caso en las redes sociales, habría continuado atendiendo por una pequeña ventana del comercio.
Entre tanto, el drone del fotógrafo Sebastián Sanabria captó el paisaje de la ciudad en el primer día de restricciones a la circulación.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas