En pleno siglo XXI dos operarios que realizaban la conexión de un caño trabajaron durante largo rato hundidos en el barro mezclado con materia fecal, como en la prehistoria. Ocurrió el viernes en calle Moreno esquina Acuña de Cañuelas, donde ABSA está realizando un cruce de calle para empalmar con un colector.
Una grabación que hicieron algunos vecinos muestra a dos empleados con el agua hasta las rodillas, con la ropa totalmente mojada, sin traje de neoprene ni elementos de protección.
En simultáneo camiones atmosféricos "chupaban" el líquido para evitar que siguiera creciendo.
Como final de la secuencia, se lavaron la ropa y la colgaron sobre una baranda para secarla y secarse al sol.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas