La oposición reclamó el acceso al RAFAM, la base contable del municipio

Los cinco sectores que conforman la oposición en el Concejo Deliberante de Cañuelas (el PRO, el bullrichista, la UCR, La Libertad Avanza y el Vecinalismo) firmaron una nota conjunta en la que reclamaron tener acceso al RAFAM, el sistema informático del municipio que concentra todos los movimientos contables permitiendo conocer ingresos y egresos del día a día, además de licitaciones y administración del personal.

La nota, firmada por Valeria Medina, Patricia Rolandelli, Claudia Pelereteguy, Emma Corbalán, Natalia Blasco, Juan Bautista Augusto, Santiago Mac Goey, Darío Morena y Leonardo Iturmendi, fue recibida el 5 de marzo el presidente del departamento Legislativo, Maximiliano Mazzanti.

Los firmantes le solicitaron que “realice las gestiones correspondientes” para proporcionarles “la clave de acceso al RAFAM con el fin de llevar adelante el ejercicio de contralor, facultad propia del Legislativo”.

Luego agregan que “la clave del sistema RAFAM resulta un elemento indispensable para poder trabajar de manera transparente, eficaz y responsable. Sin ella es imposible llevar adelante el ejercicio de contralor que nos fue asignado por nuestros votantes”, agregaron.

Este pedido realizado por la oposición no es una extravagancia. Hay una resolución del Tribunal de Cuentas (Nro. 15/2016) que en su artículo segundo señala: “Los libros y la documentación probatoria de la rendición de cuentas quedarán en custodia en el Departamento Ejecutivo y a disposición del Honorable Concejo Deliberante. Asimismo, el Departamento Ejecutivo deberá habilitar al Honorable Concejo Deliberante, mediante la asignación de usuarios y claves respectivas, el acceso al sistema informático RAFAM en forma permanente para que, con carácter exclusivo de consulta, pueda disponer de toda la información contenida en él”.

Un primer borrador de la nota fue trasladado a los demás bloques por el concejal Santiago Mac Goey, -del PRO alineado con Diego Santilli-. Ese texto era mucho más enfático ya que exigía la obtención de la clave de manera obligatoria y previa a la constitución del quorum para el tratamiento de cualquier otra temática a proponer por el oficialismo.

Algunos concejales de los otros espacios consideraron que así planteado el tema podría interpretarse como una amenaza, por lo que finalmente acordaron solicitar el acceso al sistema informático sin mencionar el quorum como condición. “Ahora la pelota está en la cancha del oficialismo, veremos cómo responden al pedido y en función de eso veremos cómo seguir, pero lo positivo es que la oposición logró ponerse de acuerdo en un tema de enorme importancia, sin perder de vista el objetivo”, dijo a InfoCañuelas una fuente del espacio Larretista.

QUÉ ES EL RAFAM

En la década del ´90 el Gobierno Nacional implementó la reforma y modernización de la administración financiera pública. En este contexto el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, a través del Ministerio de Economía, decidió impulsar una reforma de igual tenor que alcanzara también a los municipios bonaerenses.

Mediante el Decreto Provincial Nº 2980 del año 2000 se aprobó el nuevo modelo, que apuntaba a adecuar el marco legal en coordinación con el Tribunal de Cuentas; generar información oportuna y confiable sobre la situación financiera de los municipios, útil para la toma de decisiones del Estado; perfeccionar los mecanismos de coordinación fiscal entre Provincia y Municipios; evitar el desarrollo informático aislado, aplicando el principio de interrelación; y obtener información homogénea, para compilar estadísticas uniformes del conjunto del sector público.

Con financiamiento del Banco Mundial, el Ministerio de Economía desarrolló la llamada Reforma de la Administración Financiera en el Ámbito Municipal (RAFAM), que luego implementarse en cinco municipios en forma piloto, se cedió gratuitamente a todos los municipios, brindando asistencia y soporte técnico para la implementación de la herramienta.

En aquellos municipios que implementaron el RAFAM los resultados fueron palpables en el corto plazo: aumento del caudal de información financiera y automaticidad en los procesos; seguridad y transparencia en el flujo de información; programación y evaluación del presupuesto en forma participativa y descentralizada; cambio en la cultura organizacional hacia una mayor participación de funcionarios y empleados en la determinación de objetivos y metas; control más eficiente de las finanzas públicas; producción de información oportuna y homogénea para los organismos de control y coordinación, como el Tribunal de Cuentas y los concejos deliberantes.

Actualmente el sistema está compuesto por 10 módulos: Presupuesto, Contabilidad, Tesorería, Crédito Público, Contrataciones, Administración de Bienes Físicos, Inversión Pública, Administración de Personal y Administración de Ingresos Públicos + 1 de seguridad.

Durante varios años Cañuelas siguió utilizando el obsoleto sistema de la década del ´90 (SIFIM), mucho más rudimentario, lo que fue motivo de reiterados llamados de atención del Tribunal de Cuentas, hasta que progresivamente fue incorporando algunos módulos del RAFAM, aunque sin facilitar el acceso a la oposición.
 

Escrito por: Redacción InfoCañuelas