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El caso de Juan Carlos “Bocha” Cabezas, el ex paciente del Hospital Dardo Rocha de Uribelarrea, sumó un nuevo capítulo. Una vecina del barrio Los Aromos lo denunció en varias oportunidades por amenazas, acoso y violación de domicilio, por lo que la justicia le otorgó un botón antipánico. Sin embargo, el hostigamiento continúa y la mujer ya no sabe a quién recurrir para recuperar la tranquilidad.
Como se informó en este medio, Cabezas, de 51 años, fue paciente del hospital psiquiátrico hasta 2021. En ese año, a raíz de una política provincial de “desmanicomialización”, fue externado y volvió con su familia adoptiva, una pareja muy mayor que ya no podía hacerse cargo de él.
En los primeros meses de 2024 Cabezas regresó casi a diario al Dardo Rocha. Pedía que lo dejaran quedarse. Allí vivió durante 35 años, tenía compañeros y empleados con los que forjó una relación de familia.
En junio de este año el Juzgado Civil y Comercial 27 de La Plata ordenó que fuera re-internado, pero la medida no fue acatada por el nosocomio. El ex director, Guillermo Sperr, envió una carta al Juzgado informando que Cabezas ya no era paciente y que era falso que quisiera volver. Al parecer, re-internarlo hubiera significado admitir que se habían equivocado con el alta médica; o que no se hizo un seguimiento responsable durante el período de externación.
A esa altura Maia Nidasio, de 23 años, una vecina del barrio Los Aromos que vive en la misma cuadra de Cabezas, comenzó a hacer denuncias al 911. ¿El motivo? El ex paciente -sin recibir la medicación que tenía recetada- comenzó a molestarla con improperios, gestos obscenos, le rayó el auto e ingresó a su domicilio. Cuando la policía lo fue a buscar, se asustó y escapó. Estuvo algunas semanas vagando hasta que fue encontrado en la estación de trenes.
Ante la repercusión del caso en la prensa, el director interino del Dardo Rocha, Leonel Fangio, propuso asistirlo con una modalidad especial: durante el día Cabezas podía concurrir a un taller de huerta y otras labores; y de noche regresaría al lugar de Los Aromos donde pernocta.
El Juzgado 27 de La Plata, a cargo de la Dra. Jueza Dra. Alejandra Salvioli, aceptó este dispositivo sugerido por Fangio con la condición de que se lo aplicaría durante un mes con monitoreo quincenal y que en el caso de no dar resultado, se evaluaría la internación permanente o alguna otra medida de asistencia.
“Lo que implementaron evidentemente no funciona. Esta persona me cargosea, me amenaza, dice que quiere un ´mano a mano´, que me va a romper los dientes, que me va a romper todo el auto... Ya entró dos veces a mi casa y se la pasa todo el día en mi vereda diciendo barbaridades” dijo Maia a InfoCañuelas.
El viernes 23 de agosto, luego de la segunda denuncia penal, Maia recibió un botón antipánico. “Desde que lo dieron lo accioné dos veces y llamé al menos diez veces al 911” detalló.
Por los datos que pudo reconstruir InfoCañuelas, estos últimos incidentes denunciados por Maia no están incorporados en el expediente del Juzgado 27 que lleva adelante el caso de Cabezas.
El 1 de octubre Fangio envió un informe a la jueza Salvioli en el que reconoció que el plan de asistencia diurna implementado desde el 17 de septiembre no estaba funcionando del todo bien. Dijo que el paciente debería concurrir todos los días de 9 a 13 pero que no logra incorporar los horarios de entrada y salida ni los días pautados.
El 8 de octubre el Juzgado le remitió un escrito a Fangio, firmado por la curadora oficial Natalia Vecchioli. Le indicó que en un plazo máximo de cinco días deberá expedirse respecto a la conveniencia o no de continuar con el dispositivo implementado, sugerir cambios o la posibilidad de derivar a Cabezas a otro centro asistencial.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas
