El abogado y militante del PO, Dimas Ponce, preso en el Penal de Ezeiza, y su compañero César Arakaki, detenido en Marcos Paz, ambos imputados por las lesiones que sufrió el policía Braian Escobar durante los incidentes del 18 de diciembre frente al Congreso, fueron liberados por decisión del juez Federal Sergio Torres.
De todas maneras fueron embargados en 300 mil pesos y procesados por el delito de "lesiones en agresión, intimidación pública y atentado contra la autoridad, agravado por haber sido cometido a mano armada y por una reunión de más de tres personas".
Arakaki y Ponce fueron fotografiados en situación de ataque a Escobar, quien sufrió una grave lesión de cráneo, pérdida parcial de la audición y otras lesiones. Torres decidió liberar a los militantes al no poder probar que fueron ellos los autores de las lesiones más graves (el propio policía declaró que recibió un piedrazo lanzado desde la multitud). Queda por determinar si los sospechosos también ejercieron algún tipo de agresión física contra el uniformado.
En su resolución Torres indicó: "Ha quedado probado que el grupo en el que se encontraban Arakaki y Ponce tuvo, desde un primer momento, un despliegue orgánico: recuérdese que estas personas acudieron a la Plaza de los Dos Congresos ya provistas de armas y explosivos de factura casera, pirotecnia, mazas y martillos con los que luego destruyeron el espacio público para proveerse de piedras; y que respondían a las indicaciones de ciertas personas identificadas como 'líderes', evidenciando un actuar coordinado".
En respuesta al procesamiento el Partido Obrero emitió un comunicado en el que manifestó: "En la resolución, el juez Torres reconoce lo que explicamos desde un primer momento públicamente y en los escritos judiciales presentados ante el Juzgado Federal n°12, la Cámara de Apelaciones y la Cámara de Casación Penal: la completa ausencia de pruebas que justificaran que Arakaki y Ponce sean imputados y encerrados por las acusaciones de la causa. Ello, luego de que Cesar Arakaki pasara injustamente 26 días en prisión y Dimas Ponce, 15."
"De manera incongruente con esta conclusión que es finalmente demostrada y aceptada en la resolución, Torres decidió procesar a ambos militantes. El procesamiento de Arakaki y Dimas es una arbitrariedad completa: aclarado que no puede demostrar las acusaciones en curso contra ellos, los procesa por solamente haber participado de la movilización. De ella, Torres desarrolla una evaluación subjetiva de la cual saca conclusiones inspiradas en las declaraciones de los funcionarios del gobierno. Así, acredita hechos y, aún más, da por probadas serias acusaciones con su apreciación personal, criminalizante, de la movilización del 18 de diciembre."
Arakaki y Ponce ante el policía Escobar. Foto Clarín.
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Escrito por: Redacción InfoCañuelas