El grupo Scout “Padre José Garbuio” de Alejandro Petión vive horas amargas. El temporal del fin de semana inundó el sótano que ocupaban en la capilla “Nuestra Señora de la Paz” y dañó gran parte del material que guardaban para campamentos y actividades educativas.
Pero el malestar surgió de unos días antes: el nuevo sacerdote residente de la capilla, Serafín De Jesús, los expulsó de la sala de catequesis que utilizaban desde hacía varios años y los mandó a la catacumba del subsuelo, que el fin de semana terminó totalmente inundada.
A raíz de esa decisión de De Jesús, le enviaron una carta al obispo Gabriel Barba, en la que se manifestaron “indignados” con las actitudes del nuevo sacerdote. Además, cuestionaron a Cristina de Rasquetti, una vecina de la localidad que actúa como propietaria y “ama de llaves” de la parroquia decidiendo quién ingresa y quién no.
De Jesús, procedente de San Nicolás de los Arroyos, llegó a Alejandro Petión hace 15 días, autorizado por el Obispado para vivir en la capilla. Su rol es el de “sacerdote residente”. La máxima autoridad del lugar sigue siendo el padre Fabián Ferreyra, titular de la parroquia San Eduardo de Máximo Paz.
Desde su llegada al distrito las actitudes de De Jesús llamaron la atención de los habitantes de la zona. Sus misas se caracterizan por un estilo carismático que nada tiene que ver con el estilo imperante en Cañuelas. Asimismo, desplazó al grupo scout y taló, de manera inconsulta, un añoso árbol que se hallaba en el patio de la parroquia, utilizado por los chicos para sus actividades de scoutismo.
El grupo Scout fue fundado hace cinco años por el padre José Garbuio. En la actualidad cuenta con 20 chicos de entre 6 y 12 años que provienen de familias humildes de Alejandro Petión. Todos los sábados realizan catequesis y actividades de campamentismo a cargo de cuatro coordinadores. Además, han realizado colecta de libros para hacer donaciones, material que resultó dañado junto con los banderines, sogas, bolsas de dormir, garrafas, vajilla, carpas y material recreativo.
Este agrupamiento se encuentra reconocido por la Diócesis e incluso abona mensualmente un seguro para poder desarrollar sus actividades dentro del ámbito parroquial.
A raiz de lo ocurrido sus miembros pidieron la ayuda de los bomberos de Alejandro Petión para desagotar el sótano, pero hasta el momento no han obtenido respuesta.
LA CARTA A MONSEÑOR GABRIEL BARBA
A continuación se reproduce la carta enviada al obispo de la Diócesis de Laferrère:
Cañuelas, 7 de octubre de 2019.
Señor Obispo Gabriel Barba:
Por medio de esta carta nos tomamos el atrevimiento de dirigirnos a Usted como simples ovejas de su rebaño. Pertenecemos al Grupo Scout Padre José Garbuio de la localidad de Alejandro Petión, partido de Cañuelas.
El motivo por el cual nos tomamos dicho atrevimiento se debe a nuestra indignación por la llegada de un nuevo sacerdote que ha cambiado en un 100 % a nuestra comunidad. Entendemos que cada persona es diferente, pero todos somos miembros de la misma Iglesia y lo q sentimos al ser despojados de nuestro lugar para dar lugar a personas que no son de la comunidad de Alejandro Petión, modificando en forma abrupta el ritmo y forma de trabajo de nuestro método Scout, quitándonos nuestro espacio donde nuestros niños y adultos formamos este grupo.
Además, tiró abajo ciertas estructuras que los niños habían hecho y les pertenecía. Tiró abajo un árbol de más de 30 años que también era parte de nuestra comunidad, todo esto sin ser consultados, nos sentimos totalmente desplazados. Aclarando que por ocupar parte de las instalaciones nuestro grupo todos los meses abona un seguro a la diócesis para que nuestros niños puedan realizar sus actividades estando protegidos de cualquier accidente que les pueda ocurrir, estando al día con el pago.
Notamos también que se puso a cargo de todas las instalaciones de nuestra Capilla a la Señora Cristina de Rasquetti, con la cual nos cambiaron las cerraduras y pidieron que retiremos nuestras cosas, lo cual tomamos como una invitación a que nuestro grupo no pueda seguir desarrollando sus actividades de formación de niños y niñas viviendo la fe para poder ser buenos ciudadanos en el futuro.
Sentimos que esta señora autorizada por el nuevo sacerdote tomo el rol de ama de llaves, y lo único que logra es alejar más las personas de la Iglesia, convirtiendo a nuestra Capilla en un lugar selectivo, donde nadie de nuestra comunidad puede pasar a rezar debido a que sus puertas se encuentran cerradas si esta señora no está presente.
Es verdaderamente una lástima q miembros de nuestra Iglesia no puedan entender que la misma no tiene dueño y que cada día sea más sectaria, alejando a los niños que son el futuro de nuestra humanidad.
Desde ya muchas gracias.
Consejo de Grupo "Padre José Garbuio".
Escrito por: Redacción InfoCañuelas