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Luego de 14 años de laboral pastoral en el distrito, el padre Mario Slongo dejará la parroquia Nuestra Señora del Carmen de Cañuelas para asumir como titular de la parroquia San Cayetano de Gregorio de Laferrere.
En su lugar será designado el padre Walter Bejarano, actual párroco de Máximo Paz y funcionario municipal de Gustavo Arrieta: en mayo de 2014 juró como director de Integración Comunitaria y Prevención de las Adicciones, una función similar a la que tenía el padre Molina en SEDRONAR. El lugar de Bejarano en San Eduardo será ocupado por el hoy titular de San Cayetano, Fabián Ferreyra.
El alejamiento de Slongo -que era un rumor desde hacía varios meses- se confirmó este martes en una reunión de presbiterio que encabezó el obispo de la Diócesis, Gabriel Barba.
En ese cónclave se anunció un total de doce cambios en la Diócesis. En forma prioritaria serán transferidos los sacerdotes que llevan más de diez años en una comunidad. El padre Slongo supera ampliamente esa barrera, ya que llegó a Cañuelas el 22 de abril de 2001. Lo que no se confirmó aún es la fecha del cambio, que podría ser entre julio y octubre.
En Laferrere Slongo tendrá una responsabilidad similar a la que desarrolló en Cañuelas, ya que su nueva sede también cuenta con un complejo educativo, aunque de menores dimensiones al Santa María. Una de sus misiones será trabajar en la ampliación del establecimiento.
La llegada de Bejarano supone una bendición para Arrieta. El intendente nunca se llevó del todo bien con el padre Mario, quien en reiteradas oportunidades hizo comentarios muy críticos sobre la administración municipal y la inseguridad que atraviesa el distrito. Bejarano, en cambio, difícilmente se manifieste en contra de su empleador.
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Escrito por: Redacción InfoCañuelas
