A pocos días de su lanzamiento ya surgieron los primeros chisporroteos en el Movimiento Derecho al Futuro (MDF), el nuevo espacio de emancipación del cristinismo que encabeza el gobernador Axel Kicillof.
El martes pasado el abogado y secretario Legal del municipio, Sebastián Demicheli, anunció la formación de una mesa local en la que confluyen Manuel Negrín y Mario Miceli, las concejales Flavia Guardia y Fernanda Rojo (en uso de licencia) y varios dirigentes gremiales, entre ellos Fabián Ochoa, del sindicato de la carne con fuerte presencia en el Mercado Agroganadero.
“En Axel vemos una oxigenación y renovación del campo nacional y popular. Entendíamos que había una forma de conducción que estaba agotada” expresó Demicheli en alusión a Cristina y Máximo Kirchner.
Pocas horas después de esas declaraciones salió a escena un segundo grupo integrado por Marta Ferraro (UTEP), Alberto Mansilla (Sindicato Luz y Fuerza), Mario Villalba (Molineros), Roque Ríos (sindicato ex AFIP), Patricia Agüero (Frente Grande), Pedro Maldonado (Cooperativa En Bloque), Miguel Saavedra (Fricogarne), Inés Disciacca (Misioneros de Francisco) y vecinos de Máximo Paz vinculados a movimientos sociales y evangélicos.
En la tarde del 27 de febrero, luego de una reunión en la sede del frigorífico Frigocarne, este grupo difundió un comunicado en el que no se expresaron críticas directas a Cristina Fernández ni a La Cámpora, pero sí al programa de “ajuste y crueldad” de Javier Milei. “Necesitamos una canción que cantemos todos” expresaron parafraseando al Gobernador.
En diálogo con InfoCañuelas, uno de los referentes de esta facción kicillofista señaló que no se sienten representados con la mesa que lideran Demicheli y Negrín. “Eso es un grupo que armó el propio Gustavo Arrieta para cubrir el MDF con gente de su entorno y que no se meta nadie de afuera. Pero no son gente de Kicillof. Jamás cortaron su relación con Cristina o La Cámpora. Tienen un huevo en cada canasta”.
El vocero recordó que el año pasado participaron en algunas reuniones conjuntas, pero que el vínculo no prosperó. “Estábamos todos en una especie de multisectorial, pero la palabra siempre la monopolizaron Negrín y Demicheli. Nosotros queríamos plantear algunas cuestiones, como el tema de las tasas municipales, pero si decías algo en contra del municipio, no te dejaban hablar”.
“No nos sentimos representados y por eso decidimos armar un grupo aparte con la idea de incorporar cada vez más gente. Ellos son un círculo cerrado con gente que ni siquiera es de Cañuelas, como es el caso de Ocho, que viene de Ezeiza. Nosotros, en cambio, somos todos de Cañuelas y tenemos vinculación directa con Carlos Bianco y Walter Correa, que es la gente de la cúpula de Kicillof”, cerró el vocero.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas