Las variantes más populares del póquer

La historia del póquer no es una historia lineal. Empezando por sus orígenes, son múltiples los posibles antepasados del popular juego de cartas. A lo largo de los siglos, este entretenimiento ha ido evolucionando con el tiempo, adaptándose a nuevas realidades, nuevas necesidades y nuevos contextos. Esto ha hecho que hayan crecido paralelamente diferentes variantes. Aunque el Texas Hold’em es, de lejos, la más popular, son muchas más las modalidades que se juegan hoy.

Los juegos de cartas

El póquer es un juego de cartas, pero no el único. Se juega con la baraja francesa, de la que también son populares el blackjack o el solitario. Con la baraja española, se puede jugar al chinchón, el mus, la brisca y muchos más. Pero los juegos de cartas no terminan aquí, pues hay muchos juegos de mesa que también recurren a los naipes. Es el caso del popular UNO y de otros menos conocidos como Virus, Sushi Go o Dooble, todos ellos con sus propias cartas y sus propias reglas.

El póquer y su popularidad

Los orígenes del póquer están muy discutidos. Algunos se atreven a situarlos en una especie de dominó jugado con cartas con el que se entretenía un emperador chino del siglo X. Otros consideran que el As-Nas que se jugaba en la Persia del siglo XVI guarda una relación directa con el póquer moderno. No obstante, este parece más bien una evolución natural del poqué francés, que se extendió primero por toda Europa y después llegó a Nueva Orleans a lo largo del siglo XVII.

En cualquier caso, ahora, en pleno XXI, el póquer goza de una gran popularidad. Este juego de cartas es una de las grandes razones por las cuales los casinos físicos siguen abriendo las puertas cada noche. Es también increíblemente popular en las plataformas de apuestas online, especialmente por la gran variedad de juegos de poker que ofrecen. Cada año se organizan importantes torneos de póquer profesionales y además es el entretenimiento favorito en las timbas entre amigos.

El Texas Hold’em, la variante más popular

El Texas Hold’em es la variante de póquer más popular. No lo fue en sus orígenes, pues la variante Seven-Card Stud tenía el honor de serlo antes de los años setenta. Pero con la celebración de la primera Serie Mundial de Póquer en 1970 todo cambió y el Texas Hold’em no tardó en hacerse un hueco en los casinos y las salas de apuestas de todo el planeta. Ya había sido introducido en Las Vegas en 1963, a donde llegó procedente de Robstown, la ciudad texana que vio su nacimiento.

Breve comparativa de las variantes de póquer

Existen una infinidad de variantes de póquer diferentes, pero en este artículo nos hemos propuesto comparar cinco de las modalidades más populares e interesantes:

• Texas Hold’em: Sus dos principales características son que se empieza jugando con dos ciegas y que a cada jugador se le reparten dos cartas ocultas (más cinco comunitarias). El jugador a la izquierda del que ha realizado la ciega grande será el primero en empezar. Se realizarán un total de tres rondas de apuestas.

• Omaha High: La principal diferencia con el Texas Hold’em es que a cada jugador se le reparten cuatro cartas ocultas y deberá utilizar dos para crear su mano ganadora. Esta variante suele tener un límite de apuestas, lo que significa que hay un límite también en el bote.

• Seven-Card Stud: En este caso, cada jugador recibe un total de siete cartas, tres de las cuales serán ocultas. Los jugadores tendrán esos siete naipes a su disposición para crear la mejor combinación de cinco.

• Five-Card Draw: Esta versión del póquer también empieza con la ciega pequeña y la ciega grande. Luego, cada jugador recibe cinco cartas, la principal diferencia respecto al Texas Hold’em. Otra gran diferencia es que solo hay una única ronda de apuestas.

• Razz: A diferencia de las modalidades anteriores, quienes jueguen al Razz deberán intentar conseguir la peor mano posible. Por lo demás, la mayoría de reglas son las mismas que las del Seven-Card Stud.

El rico universo del póquer

Hay pocos juegos en el mundo que puedan decir que gozan de la popularidad del póquer. Quizás una de las claves del éxito es que se ha sabido adaptar a las necesidades de sus jugadores en cada momento.

Existen variantes para todos los niveles de experiencia. Algunas están pensadas para jugadores que quieran partidas rápidas, mientras que otras favorecen la estrategia y el juego lento. La gracia es encontrar aquella modalidad que mejor se amolda a ti.

Escrito por: Redacción InfoCañuelas