Un delincuente informático logró clonar la agenda telefónica de la enfermera Marcela Jara y de esta manera les escribió a todos sus contactos comentándoles que había cambiado el número. Algunos cayeron en la trampa, agendaron al impostor, comenzaron a intercambiar mensajes de WhatsApp con él y terminaron estafados: dos de las víctimas perdieron un millón de pesos en una operación de compraventa de dólares.
El farsante comenzó a enviar mensajes el martes 15 de marzo. Ni bien concluyó su turno en el Hospital Cuenca Alta, Marcela Jara se dirigió a la Comisaría 1ra. para hacer la denuncia y además lo hizo público en redes sociales. A una semana de la denuncia el impostor continúa operando a través de la línea 11 5907 3376. La justicia todavía no bloqueó esa línea ni la cuenta bancaria del delincuente, registrada en un banco de primera línea. La empresa Claro tampoco le informó a Jara a nombre de quién se encuentra esa línea ni accedió a bloquearla. La burocracia del lado de los delincuentes.
“Desde el primer momento en que me enteré de esto empecé a avisarles a todos mis contactos, lo informé en redes sociales y radiqué la denuncia. A pesar de eso a una persona logró sacarle 400 mil pesos y a otra 600 mil” explicó Jara a InfoCañuelas.
“Radiqué la denuncia hace una semana e incluso ayer hice una ampliación de denuncia, pero esta persona sigue con el teléfono activo. El viernes fui a la casa central de Claro para tratar de averiguar a quién pertenece esa línea o dónde está radicada, pero estaba cerrado. Y telefónicamente no dan ninguna solución. Pido por favor que si alguien recibe un mensaje con mi nombre diciendo que cambié el número, que lo reporte y lo bloquee. Que no entablen un diálogo. Desde hace veinte años tengo el mismo número con prefijo de Cañuelas, jamás lo cambié”, dijo Jara a InfoCañuelas.
Además de trabajar como enfermera en los Hospitales Marzetti y Cuenca Alta, años atrás Jara fue docente en la Escuela de Policía, por lo que conoce a muchos de los efectivos que trabajan en Cañuelas e incluso tiene agendados a algunos de ellos. Por eso mientras hacía la denuncia un policía que fue su alumno se le acercó para preguntarle si ella vendía dólares. En ese mismo instante el impostor estaba hablando con el policía haciéndose pasar por la mujer.
Ayer InfoCañuelas también contó el caso del conocido docente y director de teatro Mariano Aufranc, cuya agenda fue clonada por un desconocido que le escribió a todos sus contactos con el mismo objetivo de estafarlos.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas