Una niña y un varón de 7 y 8 años fueron rescatados por efectivos del Destacamento Policial de Los Pozos tras un llamado al 911 que alertó sobre los gritos de los menores que pedían agua y comida.
La situación se suscitó el sábado 31 de octubre en el complejo de viviendas. Cuando arribaron al lugar los efectivos decidieron ingresar a la casa sin orden judicial amparándose en el artículo 222 del Código Procesal Penal que los habilita a actuar de emergencia cuando hay personas solicitando socorro. Se encontraron con los chicos solos, en ambientes inundados producto de la rotura de un caño del que manaba abundante agua. Había cables cerca del piso, con riesgo de electrocución.
Ante el complicado panorama le dieron inmediata intervención al Servicio Local de Niñez y Adolescencia, que ese mismo día resguardó a los menores en la Casa de Abrigo.
Voceros oficiales revelaron que decidieron alertar al Servicio ante la reiteración de episodios, ya que la misma situación fue denunciada por vecinos el domingo del Día de la Madre.
De acuerdo a la información recabada por las autoridades, la madre de los chicos, de nacionalidad boliviana, trabaja en un taller de costura ubicado a dos cuadras. “Explicó que necesita trabajar, que no tiene recursos y que lo que gana no le alcanza para contratar una niñera. El padre de los chicos está en Bolivia y la pareja de la mamá trabaja en un horno de ladrillos de la zona. Como está cerca afirma que venía a cada rato para ver cómo estaban los chicos, que les dejaba leche y comida, pero en realidad tenían mucho hambre” detalló el vocero.
Antes de ser entregados al Servicio de Niñez los menores permanecieron unas horas al cuidado de la policía en el Destacamento, donde fueron asistidos por personal femenino, recibiendo té y comida.
Este martes la madre fue citada por el Servicio para evaluar la situación del hogar materno y la posible restitución.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas