El kinesiólogo Matías Blanco, imputado en cinco denuncias por abuso (tocamientos) declaró ante el fiscal Lisandro Damonte y en todos los casos rechazó las imputaciones aduciendo que fue víctima de una “falsa denuncia”.
El expediente se inició a fines de abril de 2021 cuando la docente Sandra Di Giácomo, de 51 años (se la identifica porque ella solicitó exponer su nombre) se presentó en la Comisaría de la Mujer para denunciar los manoseos que recibió durante una sesión de kinesiología y quiropraxia.
Al tomar estado público lo expresado por la maestra se sumaron otras cuatro denuncias de mujeres de entre 19 y 65 años por hechos similares, algunos ubicados en tiempo reciente y otros hace varios años.
En los últimos días de diciembre el profesional prestó declaración indagatoria en relación a tres de las denuncias y la última indagatoria (respecto a dos hechos denunciados por la misma mujer), fue reprogramada para febrero o marzo porque se superpuso con otras audiencias que tenía agendadas su abogado defensor.
El kinesiólogo explicó su metodología de trabajo, quiénes están en el consultorio durante las sesiones, la ubicación de cada sector, etc.
Concretamente sobre los cargos que se le formularon dijo que nunca existió un contacto físico de carácter sexual o libidinoso como el que describen las denunciantes y que fue víctima de una “falsa denuncia” a la que luego se fueron plegando otras mujeres cuando el primer hecho fue mediatizado.
Las cuatro mujeres que declararon ante Damonte detallaron las maniobras que realizó el profesional, describieron actitudes similares al momento de esas maniobras.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas