Sergio Romero, detenido por el femicidio de Graciela Castillo, se negó a declarar y en pocos días más la causa será elevada a juicio oral.
La justicia ya tiene acreditado que el peón de albañil, de 49 años, mató a su pareja, de 46, madre de 14 hijos.
El crimen ocurrió en la mañana del domingo 1 de Mayo en la vivienda alquilada por el hombre, en calles San Juan y Tristán Suárez. La presunción es que la asesinó mientras dormía mediante un solo golpe de maza o martillo grande, lo que le provocó un “traumatismo severo de cráneo” y “fractura de la base del cráneo”, consignó el médico autopsiante.
Luego de cometer el crimen Romero tapó a su pareja con una frazada y una campera. Dos o tres horas más tarde fue encontrada por su hija de seis años, quien creyó que su mamá dormía.
A media mañana se fue tranquilamente de la escena en su bicicleta celeste, sin llama la atención. El 4 de mayo fue capturado en un monte ubicado dentro del campo Santa Elena, a 1.300 metros de la uta 3, sobre un camino de tierra que bajada desde Cañuelas Pack hacia Ruta 6. Al día siguiente fue indagado por el fiscal Javier Berlingieri, pero se negó a declarar.
Fuentes judiciales indicaron que la instrucción de la causa está concluida casi en tu totalidad y que sólo resta incorporar la ficha de antecedentes.
Castillo lo había denunciado en dos oportunidades (2019 y 2021) por amenazas y lesiones agravadas, e incluso llegó a tener una restricción perimetral.
Antes de eso (en 2015 y 2016) Clelia Lizondo lo denunció por amenazas y lesiones leves.
Además, según fuentes cercanas al expediente, Romero acumula otros antecedentes por cuatrerismo y tentativa de robo agravado.
Por el momento permanece detenido en Cañuelas. En los próximos días se decretará la presión preventiva y será alojado en una unidad carcelaria hasta el juicio oral y público.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas