La unidad Vital enviada por OSPIC arribó a Cañuelas cuando el paciente se encontraba en estado crítico y con muchas dificultades para respirar. Sus familiares reaccionaron con furia contra el personal, indignados por el retraso y el abandono de la persona.
La víctima fue identificada como Manuel Correia Da Silva, de 62 años, domiciliado en la calle Mozotegui al 1100 de Cañuelas.
Este sábado, aproximadamente a las 3 de la mañana, volvía por la autopista a bordo de su camioneta Peugeot Partner, luego de participar en el cumpleaños de un hijo. A la altura del kilómetro 61, por causas que se desconocen, perdió el control, volcó y fue despido del habitáculo.
Correia sufrió politraumatismos severos, fracturas costales, fractura de hombro, un hemotórax en la zona izquierda y un scalp (levantamiento del cuero cabelludo) producto del impacto.
“Iba a ser trasladado a la Clínica de la Esperanza. La ambulancia tendría que haber llegado a la mañana, pero tardó muchísimo y cuando llegó, los familiares tuvieron una riña y golpearon a la gente de Vital. Ya le habían drenado el neumotórax y estaba estabilizando esperando el traslado, pero no resistió porque era muy fuerte el impacto que había sufrido”, dijo a InfoCañuelas un médico del Marzetti.
Frente a una demora de cinco horas por parte del servicio de Vital, ¿por qué no se utilizó una ambulancia propia del Marzetti? fue la pregunta de InfoCañuelas.
El encargado de emergencias, Roberto Byrnes, explió que el traslado requería un respirador especial con el que las unidades locales no cuentan. "Tenía sólo el 50 % de su capacidad respiratoria. En estos casos se necesita una ambulancia especial, que pocos hospitales tienen. Llamamos a la Provincia para pedir el avión sanitario, pero no tenía vuelos por el tema de la niebla. Finalmente Vital nos dijo que podían enviar una unidad a las 9 de la mañana", dijo.
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Escrito por: Redacción InfoCañuelas