Además de incendios y cobertura de siniestros viales, los bomberos voluntarios suelen resolver situaciones de toda índole, desde el rescate de gatos atrapados en un árbol hasta el salvataje de vacas o caballos caídos en un pozo.
Pero este lunes los voluntarios se enfrentaron a un desafío totalmente nuevo: un anillo atascado.
En horas del mediodía se presentó un joven con el dedo enrojecido producto de un anillo que no lograba sacarse.
Utilizando una pequeña sierra circular de precisión y una pinza, el segundo Jefe Pablo Coronel procedió a cortar el anillo y liberar el dedo.
El joven y su madre, que lo acompañaba, se retiraron agradecidos por el trabajo realizado.
“¡Están para todo!” fue el primer comentario que esta acción despertó en redes sociales.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas