El arte de la fotografía es perpetuar un momento con una mirada original pero también es esfuerzo, paciencia, tenacidad, coraje y planificación. El buen fotógrafo es el que está dispuesto a la aventura.
Es lo que acaba de lograr la fotógrafa cañuelense Tamara Pepe, quien viajó a la Patagonia para capturar imágenes del eclipse solar anular del 2 de octubre.
Con la necesaria antelación se instaló en la Meseta del Asador, localidad de Perito Moreno, al noroesta de la provincia de Santa Cruz. Junto con la Isla de Pascuas era uno de los lugares donde el fenómeno se iba a manifestar en toda su plenitud. Y así fue.
Exactamente a las 17.25 se formó el ansiado “anillo de fuego”, el momento en que la luna se interpone con el centro del sol dejando visible un círculo de luz. “El anillo duró seis minutos, por lo que tuve tiempo de fotografiarlo y después largar la cámara para disfrutarlo con mis propios ojos” contó Tamara a InfoCañuelas.
En la experiencia, en el medio de una planicie salpicada con lagunas y paredones basálticos, estuvo acompañada por el guía de la expedición, Mauro Prati Rupp @mauropratirupp, especializado en turismo de naturaleza, y Felipe, un fotógrafo argentino que vive en Suecia.
El 2 de julio de 2019 Tamara había fotografiado el eclipse parcial que se pudo ver en Cañuelas, apenas un esbozo de lo que fue el anular del 2 de octubre. “Fue asombroso, jamás había visto uno completo de sol. Y además tuve la posibilidad de dormir en la meseta donde, literal, se ve la Vía Láctea”.
Desde hace varios meses Tamara está recorriendo las provincias de Entre Ríos, Misiones, Córdoba, Catamarca, Jujuy, Tucumán, Salta, Mendoza, San Luis, Neuquén, Santa Cruz y Tierra del Fuego, documentando imágenes de la naturaleza que formarán parte de un futuro libro de historias visuales.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas