Mucho se ha escrito sobre la vida de Don Vicente Lorenzo Casares, agrónomo formado en Europa, fundador de La Martona, pionero en la cría de caballos de raza, presidente del Banco Nación y del Jockey Club, diputado nacional por el Partido Autonomista y varias veces candidato a gobernador y a vicepresidente de la Nación. Lo que nunca trascendió en su biografía es que también fue Comisionado Municipal de Cañuelas.
El padre de la lechería argentina moderna accedió a ese cargo por una resolución del 2 de diciembre de 1899 firmada por el gobernador radical Bernardo de Irigoyen, luego de un período de acefalía que atravesó el municipio local.
El dato sobre ese rol hasta ahora desconocido de Casares aparece en el libro “Acuerdos y Sentencias dictados por la Suprema Corte de Justicia de la Provincia desde 1810”. Entre las páginas 432 y 435 se ventila una demanda que le inició el intendente municipal de Cañuelas, Norberto N. Arrieta, electo para los años 1898 y 1899.
En dicho pleito Arrieta se quejaba de que Vicente Casares, en su función de Comisionado, le impedía ejercer el cargo de Intendente por lo que exigió que la Justicia dirimiera el conflicto de atribuciones.
En la introducción del fallo -que se reproduce al pie de este artículo- se explica que Vicente L. Casares había sido designado como Comisionado en virtud de la Ley del 9 de septiembre de 1897 que autorizaba al Ejecutivo Provincial “a hacerse cargo de los servicios locales urgentes mediante un comisionado municipal amovible al que puede conferirle las facultades administrativas del Intendente Municipal”.
En la sentencia dictada el 23 de octubre de 1900, los jueces supremos Carlos Dimet, Néstor French, José A. Capdevila y Dalmiro Alsina determinaron que Arrieta había sido electo para los períodos 1898 y 1899 y que si bien fue reelecto a fines del ' 99, al momento de iniciar el pleito judicial el Concejo Deliberante no lo había ratificado en el cargo (en ese período se votaba a concejales que luego se reunían en asamblea para definir quién sería el jefe comunal).
“Aún cuando el mencionado Arrieta, como presidente que fue del Concejo Deliberante, se haya autorizado para citar a los municipales electos a fin de constituirse, carece de personería para promover esta contienda”, concluyeron los magistrados, rechazando el planteo.
En sus “Bases Documentales para la Historia de Cañuelas”, Lucio García Ledesma menciona el conflicto de acefalía de 1898, la elección de Norberto Arrieta y la continuidad de José Lino Arauz en 1901 y Rodolfo Ruiz en 1903, pero se saltea ese período de más de un año en el que Vicente Casares ocupó el Palacio Municipal.
El nombramiento de comisionados era un rasgo típico de la época. Al amparo de la Ley de 1897 el Gobierno Provincial designaba a personas afines tanto en las municipalidades como en los consejos escolares, buscando incidir en la política local, vulnerando la autonomía municipal.
Si bien no quedan registros locales sobre el período de gobierno ejercido por Don Vicente Casares, hay publicaciones de la Sociedad de Damas de Beneficencia que le agradecen su decisivo apoyo en favor de la construcción del Hospital Mitre.
Germán Hergenrether
InfoCañuelas agradece la invalorable colaboración de Martiniano Etchart por haber gestionado ante la Biblioteca de la Universidad de Michigan una copia del documento judicial aquí publicado.
Escrito por: Germán Hergenrether