En 1991 Adolfo Cambiaso era la revelación de la temporada estadounidense de polo. Con 16 años quien aparecía como una promesa, explotó en toda su dimensión para ser la figura de Cellular One el equipo que se adjudicaría finalmente la Copa de Oro, uno de los más prestigiosos certámenes del mundo en el polo de alto hándicap.
Treinta años después de dicha conquista y con una infinidad de títulos en su haber, el astro de Cañuelas volvió a levantar el mismo trofeo, esta vez con el conjunto de Scone y nada menos que en compañía de su hijo Poroto.
Los Cambiaso fueron las principales figuras del conjunto de Scone que se impuso en la final a Tonkawa por 13 a 10 en la cancha principal del International Polo Club de Wellington en el estado de Florida.
Fue el 15° título de Cambiaso en esta competición que integra la triple corona del polo estadounidense. Adolfo “Poroto” Cambiaso fue elegido el jugador más valioso del partido decisivo, en donde Scone impuso condiciones desde el inicio, para dominar el trámite en toda la extensión del encuentro.
Con esta victoria, Adolfo Cambiaso agiganta su leyenda y a punto de cumplir 46 años sigue dominando el polo mundial, justo 30 años después de lo que sería su primer impacto en la alta competencia.
Cambiaso, el jugador que cuenta por lejos con la mayor cantidad de títulos de todos los que se encuentran en actividad encabeza también las posiciones del World Polo Tour, que es el ranking individual de polistas en competencia.
Cuando casi la totalidad de polistas contemporáneos a su primera conquista internacional han dejado hace rato la actividad competitiva de alto hándicap, el crack de Cañuelas sigue plenamente vigente, agigantando su legado, ese que lo ha convertido en el polista más grande de la historia.
Leonardo Garavaglia
Escrito por: Leonardo Garavaglia