Con el correr de las horas surgen nuevos elementos que ponen en tela de juicio la respuesta del Hospital Angel Marzetti ante la desaparición de un paciente que dos días más tarde fue encontrado muerto en una obra aledaña al centro de salud.
Este sábado una testigo -que pidió mantener su nombre en reserva- aportó a InfoCañuelas dos imágenes que muestran el preciso instante en el que Antonio Miguel Benedicto, vestido con remera verde, pañales y alpargatas, está entrando a la obra en construcción donde finalmente murió.
Las fotos fueron tomadas el lunes 23 de diciembre a las 20.05. “Yo estaba con mi hijo en la parada del colectivo. Una señora que estaba conmigo dio aviso en la guardia y otra señora que salió del supermercado chino con su hija embarazada también se cruzó para avisar que este señor había entrado al terreno de al lado” relató la testigo a InfoCañuelas.
“A una de las señoras que fue a la guardia le dijeron que ellas eran mujeres, que no podían hacer nada, que tenían que esperar que viniera alguien de seguridad, algún hombre, porque ellas eran mujeres y no podían entrar. Nunca pensé que lo iban a dejar abandonado. ¿Esta gente no tiene familia, padres, abuelos? Me apena lo que sucedió con este pobre hombre”.
“Yo estuve en la parada hasta casi las 21 hs. y en ningún momento vi que alguien del hospital saliera a buscarlo. Había una persona de seguridad, pero tampoco lo vi entrar a la obra; sólo lo vi cruzar a comprar una Coca. Una doctora o enfermera se asomó en un momento, miró hacia la calle y se metió nuevamente al Hospital” añadió.
La testigo agregó que a pesar de su extrema delgadez el hombre caminaba “bastante bien, estuvo un ratito parado junto a la obra porque no podía entrar, hasta que levantó un pie y pasó junto a una lona”.
“Pensé que seguramente lo habían buscado por la parte de atrás de la construcción. Si hubiera imaginado que no iban a hacer nada, habría llamado a la policía” concluyó.
Como lo informó InfoCañuelas, Antonio Miguel Benedicto, de 61 años, empleado rural domiciliado en Gobernador Udaondo, se encontraba internado en el Hospital Marzetti con cuidados paliativos a causa de un cáncer terminal. El 23, tal vez confundido por las drogas que estaba recibiendo, abandonó su cama y escapó, sin ser advertido por enfermeros o personal de seguridad. En la tarde de Navidad fue encontrado en una construcción aledaña, ubicada en calle Rawson esquina Cafrune. Durante las 48 horas en la que permaneció desaparecido el Hospital no realizó la denuncia. Un yerno de Benedicto confirmó a este portal que recién el miércoles 25 al mediodía el Hospital les confirmó que el paciente ya no estaba internado.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas