Un hombre camina por los alrededores del Hospital Dardo Rocha de Uribelarrea, pidiendo que lo dejen entrar y que le den comida. No tiene más que una bolsa con algunas prendas. Vivió toda su vida en ese hospital hasta que en 2021 regresó con su familia del barrio Los Aromos. Tres años después ya no pueden hacerse cargo de él y entonces “Bocha” -como lo conocen en Uribe- decidió pedir asilo en el único lugar que le queda.
La situación de Bocha merodeando el edificio sin poder entrar -mucho más penosa en un contexto de temperaturas bajo cero- conmueve a varios vecinos de Uribelarrea que se comunicaron con InfoCañuelas para contar el caso.
“Vivió en el hospital desde chiquito, durante cuarenta años o tal vez más. No es violento ni problemático, pero tampoco es un muchacho que pueda valerse por sí mismo. No puede trabajar ni mantenerse. A lo sumo puede hacer algún mandado. Me da mucha tristeza verlo en la esquina y que no lo dejen entrar” contó una vecina a este portal.
“En algún momento tuvo algunas salidas a Apyad, cuando los internos iban a trabajar, pero fueron contadas ocasiones. Siempre vivió en el Hospital” añadió la mujer.
En 2021, luego de la pandemia, con la implementación de la Ley que promueve la “desmanicomialización” -es decir la reinserción de los pacientes con sus familias o su traslado a viviendas alquiladas por el Estado donde viven de manera independiente con un cuidador- Bocha recibió el alta. Volvió con su familia de Los Aromos (una sobrina y una “madre del corazón”). Luego de un período en Cañuelas y otro en Chaco, la familia ya no está en condiciones de cuidarlo. “No lo pueden manejar, no les hace caso”, describió una fuente consultada por este medio.
InfoCañuelas intentó hablar con el director del Hospital, Guillermo Sper, pero no hubo respuesta, por lo que no es posible conocer los motivos formales que impiden el regreso de Bocha.
Al parecer, la aplicación de la Ley de Salud Mental implicó un cambio de paradigma: el dardo Rocha ya no es un hospital y hogar para gente si familia, como era antes, sino un centro psiquiátrico exclusivamente. Por lo tanto, ningún profesional quiere tomar la responsabilidad de firmar el ingreso de Bocha sin una patología que lo justifique.
Hubo excepciones: Sosa, un paciente de Lobos que se reinsertó con su familia durante un tiempo, finalmente volvió al Hospital. Bocha no tiene la misma suerte.
Se habría iniciado una causa judicial en La Plata con la intención de buscarle un hogar, trámite que podría demorar meses. Mientras tanto Bocha sigue dando vueltas, pidiendo que lo dejen volver al único lugar donde tal vez se sintió cuidado.
Escrito por: Redacción InfoCañuelas